El Apostolado del Rosario en Familia en Perú anima a los fieles a unirse en oración por la santificación de los sacerdotes este viernes 19 de junio, y enviar un video rezando tres avemarías para crear un gran Rosario virtual.
Por medio de un comunicado, el director del Apostolado del Rosario en Familia, Elmer Caro Aguirre, indicó que la “fiesta del Sagrado Corazón de Jesús ha sido motivo para unirnos como Iglesia y rezar por la santificación de nuestros sacerdotes”, por lo que invitó a no dejar esta tradición este año a pesar de las circunstancias adversas.
Caro señaló que el rezo del Rosario por los sacerdotes es un evento que “se ha venido realizando alrededor del mundo, alternando el rezo de los misterios del Rosario de país a país”.
Esta iniciativa anual nace gracias al grupo de laicos Worldpriest, al que pertenece el Apostolado del Rosario en Familia, quienes animan a orar por aquellos que “dan su vida por nosotros”.
“Cada año, decenas de países se unen en oración para, cada media hora, rezar una coronilla del Rosario”, señala el apostolado en su página web.
Este año, 85 países se unirán en oración por la vida consagrada, entre los cuales, Perú rezará los misterios gozosos a las 9:00 a.m. (hora local) el viernes 19 de junio.
El apostolado indica que por las circunstancias de la pandemia de coronavirus, el rezo no se podrá realizar en la Basílica del Santísimo Rosario en Lima, como se hacía habitualmente los años anteriores, por lo que este año se hará de manera virtual.
“La Iglesia unida se mantiene firme y reunida, gracias a la tecnología, y es esta tecnología la que nos permitirá realizar el rezo global virtual por la santificación de los sacerdotes”, señaló Caro.
Para lograrlo, el apostolado anima a los fieles a enviar un video rezando tres avemarías a su página de Facebook o al correo rezocontigo@rosarioenfamilia.org.pe los cuales se unirán para lograr un gran Rosario virtual que será transmitido por sus redes sociales a la hora del rezo del Rosario en Perú.
Para mayor información puede visitar el evento en Facebook o la página web del apostolado.
Cada 13 de mayo se celebra en todo el mundo la Fiesta de la Virgen de Fátima, en memoria de su primera aparición en las colinas de Cova de Iría (Portugal) en 1917.
Este año el Papa Francisco viajó a Fátima por los 100 años de las apariciones y la canonización de los pastorcitos Francisco y Jacinta Marto.
“No tengáis miedo. No os hago daño”, dijo la Virgen María el día de la primera aparición a Lucía, Jacinta y Francisco, los niños pastores que contemplaban a una señora vestida de blanco, más brillante que el sol
Después de decirles, entre otras cosas, que era del cielo y de pedirles que volvieran a ese lugar seis meses seguidos el día 13 a la misma hora, la Madre de Dios les preguntó:
“¿Queréis ofreceros a Dios para soportar todos los sufrimientos que Él quisiera enviaros como reparación de los pecados con que Él es ofendido y de súplica por la conversión de los pecadores?»
Los pequeños le respondieron que sí querían. A lo que la Virgen les advirtió que tendrían que sufrir mucho, pero que la gracia de Dios los fortalecería.
La Señora abrió sus manos y les comunicó una luz que los invadió. Cayeron de rodillas y repitieron humildemente: “Santísima Trinidad, yo te adoro. Dios mío, Dios mío, yo te amo en el Santísimo Sacramento”.
La Virgen de Fátima finalmente les dijo: “Rezad el rosario todos los días para alcanzar la paz del mundo y el fin de la guerra”. Luego se elevó.
Los siguientes meses los niños acudieron las veces que la Virgen los llamaba, pero tuvieron que pasar por burlas, calumnias, amenazas y la cárcel por la incomprensión de la gente. Poco después Francisco y Jacinta fallecieron con dolorosas enfermedades.
Con el tiempo la Iglesia reconoció las apariciones milagrosas y la devoción a la Virgen de Fátima se expandió por todo el mundo.
San Juan Pablo II consagró Rusia al Inmaculado Corazón de María, tal como había sido el pedido de la Madre de Dios y beatificó a los videntes Jacinto y Francisca en el 2000 con la presencia de Sor Lucía, quien falleció en el 2005.
Oraciones que la Virgen de Fátima enseñó a los niños
Sor Lucía cuenta en la “cuarta memoria” que la Virgen, en la aparición del 13 de julio de 1917, les recomendó:
“Sacrificaos por los pecadores, y decid muchas veces, en especial cuando hagáis algún sacrificio: Oh Jesús, es por vuestro amor, por la conversión de los pecadores y en reparación por los pecados cometidos contra el Inmaculado Corazón de María”.
Luego María insistió:
“Cuando recéis el rosario decid, al final de cada misterio: Oh Jesús mío, perdonadnos, libradnos del fuego del infierno, llevad al Cielo a todas las almas, especialmente las más necesitadas de vuestra misericordia”.
Al celebrar la Misa en el Domingo de Resurrección en la Basílica de San Pedro, el Papa Francisco expresó su deseo y oración para que Jesús, “que ya venció la muerte abriéndonos el camino de la salvación eterna, disipe las tinieblas de nuestra pobre humanidad y nos introduzca en su día glorioso que no conoce ocaso”.
“El Resucitado no es otro que el Crucificado. Lleva en su cuerpo glorioso las llagas indelebles, heridas que se convierten en lumbreras de esperanza. A Él dirigimos nuestra mirada para que sane las heridas de la humanidad desolada”, dijo.
El Santo Padre señaló que “hoy pienso sobre todo en los que han sido afectados directamente por el coronavirus: los enfermos, los que han fallecido y las familias que lloran por la muerte de sus seres queridos, y que en algunos casos ni siquiera han podido darles el último adiós”.
“Que el Señor de la vida acoja consigo en su reino a los difuntos, y dé consuelo y esperanza a quienes aún están atravesando la prueba, especialmente a los ancianos y a las personas que están solas”.
También pidió que Cristo “conceda su consolación y las gracias necesarias a quienes se encuentran en condiciones de particular vulnerabilidad, como también a quienes trabajan en los centros de salud, o viven en los cuarteles y en las cárceles”.
“Para muchos es una Pascua de soledad, vivida en medio de los numerosos lutos y dificultades que está provocando la pandemia, desde los sufrimientos físicos hasta los problemas económicos”, lamentó.
El Papa señaló que la pandemia del coronavirus COVID-19 “no sólo nos está privando de los afectos, sino también de la posibilidad de recurrir en persona al consuelo que brota de los sacramentos, especialmente de la Eucaristía y la Reconciliación”.
“En muchos países no ha sido posible acercarse a ellos, pero el Señor no nos dejó solos. Permaneciendo unidos en la oración, estamos seguros de que Él nos cubre con su mano, repitiéndonos con fuerza: No temas, ‘he resucitado y aún estoy contigo’”.
“Que Jesús, nuestra Pascua, conceda fortaleza y esperanza a los médicos y a los enfermeros, que en todas partes ofrecen un testimonio de cuidado y amor al prójimo hasta la extenuación de sus fuerzas y, no pocas veces, hasta el sacrificio de su propia salud”, expresó.
El Papa Francisco destacó además que “este no es el tiempo del egoísmo” y “no es tiempo de la división” ni el olvido, al tiempo que alentó a que se acaben las distintas guerras y conflictos en el mundo, y pidió que Cristo “permita alcanzar soluciones prácticas e inmediatas en Venezuela”.
Concluido su mensaje de Pascua, el Papa Francisco impartió a los fieles de todo el mundo su Bendición “Urbi et Orbi”.
Cada 11 de febrero la Iglesia celebra la Fiesta de Nuestra Señora de Lourdes, quien en una de sus apariciones le dijo a Santa Bernardita: “No te prometo hacerte feliz en este mundo, sino en el próximo». Aquí el significado de sus apariciones, el mensaje que dejó y los milagros que se dieron con su intercesión.
Era el 11 de febrero de 1858, Bernardita, su hermana y otra niña iban al campo a buscar leña seca, cerca de una gruta. Para llegar ahí tenían que pasar por un arroyo. Bernardita no se atrevía a adentrarse porque el agua estaba muy fría. Se empezó a sacar los zapatos, cuando de pronto escuchó un ruido fuerte proveniente de la gruta.
Se acercó a ver lo que pasaba y ahí en ese lugar sucio y pedregoso se apareció la Virgen envuelta en una luz resplandeciente, con un traje blanco de un tejido desconocido, una cinta azul en la cintura, un largo velo blanco y dos rosas doradas brillantes que le cubrían la parte superior de los pies.
En sus manos, la Virgen tenía un largo rosario blanco y dorado. Entonces juntas empezaron a rezarlo. El domingo 14 de febrero, Bernardita en la gruta reza la primera decena del Rosario y María se aparece. La niña le tira agua bendita para asegurarse que no era una obra del enemigo. La Virgen sonríe, se persigna con el Rosario y lo rezan juntas.
El jueves 18 la Virgen le pide a Bernardita que regrese por quince días seguidos a la gruta. Ante la aceptación y promesa de la pequeña, María le promete hacerla dichosa en el otro mundo. Los rumores de las apariciones se empiezan a esparcir.
El 19 de febrero, Bernardita va con una vela bendecida y encendida. Es así que nace la costumbre de ir con velas para encenderlas ante la gruta. El 20 de febrero la Señora le enseña una oración personal a Bernardita.
El domingo 21, la niña ve que la Virgen estaba triste, le pregunta lo que le pasa y Nuestra Señora le contesta: “Rogad por los pecadores”. Para ese entonces las autoridades amenazaron a Bernardita con llevarla a la cárcel y todos se burlaban de ella.
El 22 la Virgen no se le apareció, pero la niña no perdía la esperanza de volverla a ver. El 23, diez mil personas fueron a ver lo que pasaba. La Virgen se le apareció a Bernardita y le pidió que les diga a los sacerdotes que eleven ahí un santuario, a donde se debe ir en procesión.
La niña va y le comenta al sacerdote, quien a cambio pide el nombre de la Señora y que florezca un rosal silvestre sobre el que se aparecía.
El 24 la pequeña le cuenta todo a la Virgen, quien sólo sonrió. Luego María la mandó a rogar por los pecadores y exclamó: “¡Penitencia, penitencia, penitencia!… ¡Ruega a Dios por los pecadores! ¡Besa la tierra en penitencia por los pecadores!” Bernardita así lo hizo y pedía a los espectadores que hicieran lo mismo.
El 25 de febrero la Virgen le ordena beber, lavarse los pies en la fuente y comer hierba. Bernardita, por indicación de María, escarbó en el fondo de la gruta y empezó a brotar agua.
El 26 se produce el primer milagro. El pobre obrero Bourriete, que tenía el ojo izquierdo mutilado, ora y se frota el ojo con el agua de la fuente. Luego empezó a gritar de alegría y fue recuperando la vista. El 27 la Virgen permanece en silencio, Bernardita bebe del agua del manantial y hace los gestos recurrentes de penitencia.
El 28 Bernardita va a la gruta, pero luego es llevada a casa el juez y amenazada de ir a cárcel. En la noche, Catalina Latapie moja su brazo dislocado y el brazo y la mano recuperan su agilidad, produciéndose un segundo milagro.
El martes 2 de marzo, Bernardita va de nuevo donde el párroco a recordarle el pedido de la Virgen.
El 3 de marzo la pequeña le pregunta de nuevo su nombre y la Virgen sonríe. Ese día, una madre en su desesperación lleva en brazos a su hijo que estaba medio muerto. Lo metió 15 minutos en el agua fría y al llegar a casa notó mejoría en la respiración del niño.
Al día siguiente, el niño estaba lleno de vida y completamente sano. Los médicos certificaron el milagro y lo llamaron de primer orden.
El 4 de marzo, al finalizar los quince días, la visión permanece silenciosa. El 25 de ese mes la Virgen se apareció a Bernardita, levantó los ojos hacia el cielo, juntó en signo de oración las manos que tenía abiertas y tendidas hacia el suelo y le dijo a Bernardita: “Soy la Inmaculada Concepción”.
La pequeña salió corriendo a decirle al párroco, quien se conmueve ante la revelación del nombre ya que cuatro años antes se había proclamado el dogma de la Inmaculada Concepción.
El 7 de abril, Bernardita en la gruta y en éxtasis pone su mano sobre la llama de la vela encendida que había llevado y no se quema. Después de la aparición, su mano estaba ilesa y fue comprobado por un médico que presenció el hecho.
El 16 de julio se produjo la última aparición. Bernardita sintió la misteriosa llamada y al llegar a la gruta se dio cuenta que estaba vallada y no se podía pasar. Se dirige entonces al otro lado, enfrente de la gruta, y vio a la Madre de Dios. ”Me pareció que estaba delante de la gruta, a la misma distancia que las otras veces, no veía más que a la Virgen. ¡Jamás la había visto tan bella!”, dijo Santa Bernardita.
Algunos consideran que la aparición de Nuestra Señora de Lourdes es un agradecimiento del cielo por el dogma de la Inmaculada Concepción y es exaltación a las virtudes de pobreza y humildad como la que tenía la pequeña Bernardita.
Asimismo afirman que es un llamado a aceptar la cruz para ser felices en la otra vida, la importancia de la oración, del Santo Rosario y la penitencia con una misericordia infinita por los pecadores y los enfermos.
El agua de la gruta ha sido analizada por químicos, quienes señalaron que es un agua virgen, pura, natural, sin propiedad térmica y en la que ninguna bacteria sobrevive. Para los cristianos esto es símbolo de la Inmaculada Concepción.
El Obispo de Lurín (Perú), Mons. Carlos García Camader, presidió una Misa por las víctimas de la tragedia ocurrida el pasado 23 de enero en Villa El Salvador cuando la explosión de un camión que transportaba gas dejó al menos 22 muertos y más de 30 heridos.
“Hoy, queridos hermanos, no hemos hecho la Misa en un templo cerrado sino en un templo abierto que es esta calle. Creo que en estos días en eso se ha convertido esta manzana, en un templo vivo de creyentes y no creyentes buscando una respuesta humana a algo que no tiene respuesta directa”, dijo el Prelado en la Misa que presidió el viernes 31 de enero en el lugar de los hechos.
“Cuando morimos el hoy del hombre queda grabado en el tiempo y este se acaba para pasar luego a vivir la eternidad para siempre. Ese es el hoy de Jesús, esa es la realidad que Jesús nos muestra en la cruz, pero que la testimonia y la sella con su presencia resucitadora en medio de los que creen y esperaban lo que Él les había prometido”, continuó.
Mons. García resaltó luego que “en la vida no hay hora para la muerte, puede tocarnos en la mañana, en la tarde y en la noche, pero lo que importa es que nunca dejemos de esperar. Esa espera no nace de un sentimiento puramente humano”.
“Los hombres fallamos, las promesas de los hombres tarde o temprano ya no sacian la realidad humana ni el deseo de lo que necesitamos, por eso Dios mismo vino a convertirse en esa palabra de esperanza en medio del dolor y el sufrimiento, por eso cuando vemos que todo se acaba y que nada es importante es cuando mejor entendemos lo que Jesús nos dice: Yo soy el camino, la verdad y le vida”.
El Obispo dijo también que los presentes en la Misa tienen “la oportunidad de cambiar, en este tiempo que ya ha terminad para los que se fueron. Tú puedes cambiar y preguntarse qué te queda por delante. Te queda el dolor, sí, pero ese dolor te puede hacer actuar con esperanza y coherencia en las cosas simples de la vida”.
Mons. García recordó la importancia de rezar por los difuntos y por los que aún luchan por su vida, considerando que los heridos están quemados en su gran mayoría.
“Cuando un pueblo se reúne y ora se pueden conseguir los milagros”, resaltó el Prelado y recordó que “los mártires en los primeros siglos de la Iglesia murieron quemados pero muchos no sintieron el calor del fuego porque la Iglesia estaba en oración porque esta protege, fortalece y es un bálsamo para el sufrimiento”.
El Obispo propuso luego crear en el lugar algo que llamó el “Muro del amor y la misericordia” donde se coloque “los nombres de todos los que partieron para recordarlos y yo vendré a bendecirlo”.
Desde un primer momento, varios sacerdote y Mons. Carlos García han estado acompañando a las personas en el lugar de la tragedia y han brindado ayuda no solo espiritual sino también material.
La tragedia de Villa El Salvador
El 23 de enero, a primeras horas del día, un camión que transportaba GLP (gas licuado del petróleo) sufrió un accidente, que provocó la fuga del gas y la posterior explosión en el distrito de Villa el Salvador, en Lima, capital del Perú.
Como consecuencia del accidente han fallecido al menos 22 personas y más de 30 resultaron heridas. Entre las víctimas hay varios niños.
Según señalan medios locales, la ministra de Salud, Elizabeth Hinostroza, informó que más de la mitad de los heridos tienen quemaduras en el 80% del cuerpo.
El alcalde de Lima, Jorge Muñoz, detalló que el siniestro dejó seis viviendas inhabitables y 14 familias que requieren su reubicación. Por ello puso a disposición de los damnificados un conjunto habitacional en el Cercado de Lima.
Además, el gobierno declaró en estado de emergencia el sector comprendido entre las avenidas El Sol, Micaela Bastidas, Juan Velasco Alvarado y María Elena Moyano en Villa El Salvador.
Esta tragedia ha conmovido a todo el país, por el impacto de los daños y el gran número de muertos que trataron de salvarse en medio de la desesperación.
La tragedia también ha generado una gran cadena de solidaridad que comenzó con la donación de sangre por parte de cientos de personas, y la ayuda para cubrir las principales necesidades de los afectados como la alimentación.
Cada 28 de enero se celebra a Santo Tomás de Aquino, patrono de los estudiantes, quien escribió la famosa obra “Summa Teológica”.
Santo Tomás de Aquino nació en Roccasecca, cerca de Aquino en Nápoles, en 1225. Realizó sus primeros estudios con los benedictinos en Montecassino, cerca al castillo de sus padres. Fue a la Universidad de Nápoles y destacó por su gran inteligencia.
Al conocer a la naciente comunidad de Padres Dominicos, se une a ellos con la oposición de su familia. Huye hacia Alemania, pero en el camino sus hermanos lo apresan y lo encierran por dos años en el castillo de Roccasecca. Tiempo que aprovechó para estudiar Biblia y Teología.
Los hermanos al ver que Tomás no desistía de su idea, le envían una mujer de la mala vida para hacerlo pecar, pero el santo, con un tizón encendido, la amenaza con quemarle la cara, entonces la mujer salió despavorida.
El Santo obtiene su liberación y es enviado a Colonia en Alemania donde fue instruido por el sacerdote dominico San Alberto Magno. Sus compañeros lo tomaban por tonto al verlo robusto y silencioso y lo apodaron “el buey mudo”.
Pero cierto día un compañero le pidió sus apuntes y se los entregó a San Alberto, quien dijo: «Ustedes lo llaman el buey mudo, pero este buey llenará un día con sus mugidos el mundo entero». No obstante, la devoción de Santo Tomás era lo que más resaltaba. Solía pasar mucho tiempo en oración y vivía un gran amor a la Eucaristía.
El joven Santo Tomás se graduó como doctor de teología en la Universidad de París y a sus 27 años ya era maestro en esa ciudad. Más adelante es convocado por el Papa y por siete años recorrió el país italiano predicando y enseñando. Incluso el rey San Luis le consultaba los asuntos de importancia.
En cuatro años escribió “la Summa Teológica”, su obra maestra de 14 tomos, que se volvió tan importante que el Concilio de Trento utilizó tres libros de consulta: la Biblia, los Decretos de los Papas y la “Suma Teológica” de Santo Tomás.
Lo admirable de este santo es que la sabiduría no la adquirió tanto en la lectura de libros, sino de rodillas y en oración ante el crucifijo. Además, cuando exponía sus ideas, las hacía con respeto y total calma, aun cuando sus contrincantes lo ofendían.
Compuso el “Pangelingua” y el “Tantum ergo”, así como otros cantos Eucarísticos que se entonan hasta nuestros días, por pedido del Papa, quien le solicitó que escribiera himnos para la Fiesta del Corpus Christi.
Jesucristo se le apareció y le dijo: «Tomás, has hablado bien de mí. ¿Qué quieres a cambio?». Santo Tomás respondió: «Señor: lo único que yo quiero es amarte, amarte mucho, y agradarte cada vez más».
Asimismo, su devoción a la Virgen era tal que en sus cuadernos escribía “Dios te salve María” y compuso un tratado sobre el Ave María.
Al final de su vida fue enviado por el Sumo Pontífice al Concilio de Lyon, pero enfermó en el camino. Fue recibido en el monasterio cisterciense de Fosanova y al llevarle la comunión, Santo Tomás dijo:
«Ahora te recibo a Ti mi Jesús, que pagaste con tu sangre el precio de la redención de mi alma. Todas las enseñanzas que escribí manifiestan mi fe en Jesucristo y mi amor por la Santa Iglesia Católica, de quien me profeso hijo obediente».
Partió a la Casa del Padre un 7 de marzo de 1274 a los 49 años. Su cuerpo fue llevado con mucha solemnidad a la Catedral de Tolouse un 28 de enero. Fue declarado Doctor de la Iglesia en 1567.
Santo Tomás de Aquino es representado con el Espíritu Santo, un libro, una estrella o rayos de luz sobre su pecho y la Iglesia.
“Sabemos que su Santidad planea una visita más a nuestra región. Quiero alentarle a darse un salto al Perú, país de histórica fe y de profundo corazón andino”, le expresó el presidente Pedro Pablo Kuczynski al papa Francisco, en una misiva remitida al Vaticano el pasado 21 de marzo.
El mandatario envió esa carta en un contexto catastrófico para el Perú: cinco días antes, el desborde del río Rímac había dejado cientos de damnificados en Carapongo y un huaico había matado a dos personas en Punta Hermosa. Además, los deslizamientos y desbordes seguían inundando las ciudades del norte, hechos que Jorge Mario Bergoglio, nombre secular del Papa, no había pasado por alto.
“Quiero transmitir mi cercanía a la querida población del Perú, duramente afectada por devastadoras inundaciones. Rezo por las víctimas y por quienes se afanan en ofrecer socorro”, dijo en marzo el Papa, desde una ventana en la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.
Ese mes, la Santa Sede también donó al Perú US$100.000 para atender a los damnificados. El Perú ha estado en el corazón de Francisco. Y ahora, según se anunció ayer, su apoyo espiritual será expresado frente a frente.
—Pisará suelo peruano—
En una breve reunión a la que asistió el presidente, las autoridades eclesiásticas informaron que el santo padre visitará el Perú del 18 al 21 de enero del 2018, cuando se cumplan 30 años de la última visita de un Papa al país. Lima, Puerto Maldonado (Madre de Dios) y Trujillo (La Libertad) son las ciudades elegidas para la gira del próximo año.
No se dio ningún detalle más de la visita, salvo que a su paso por la capital se hospedará en la Nunciatura Apostólica, en Jesús María.
Además, que cuatro días previos a su viaje al Perú, Bergoglio visitará Santiago, Temuco e Iquique, en Chile.
“Él viene como un peregrino de paz, de justicia, de unidad. Creo que es una ocasión inmejorable para que todas las familias peruanas unidas busquen lo mejor”, expresó tras el anuncio el arzobispo de Lima, cardenal Juan Luis Cipriani.
El primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal Peruana y arzobispo de Trujillo, monseñor Miguel Cabrejos, explicó que se eligió Puerto Maldonado porque es un símbolo de los pueblos originarios y amazónicos, y con serios problemas de degradación ambiental.
Se optó por Trujillo porque fue una de las ciudades del norte más azotadas por el fenómeno de El Niño. “Si bien irá a estas dos ciudades y a Lima, la visita del Papa será para todos los peruanos”, expresó Cabrejos.
—Por Latinoamérica—
Francisco asumió el máximo cargo de la Iglesia Católica el 13 de marzo del 2013 y se convirtió en el primer Papa latinoamericano.
Desde entonces emprendió viajes apostólicos que incluyeron varios países de Latinoamérica. En el 2013 visitó Río de Janeiro (Brasil). En el 2015, recorrió Ecuador, Bolivia y Paraguay. El Papa viajó en el 2016 a México. Entre los países pendientes, estaba el nuestro. 
Dato
El Sumo Pontífice cumplió 80 años el pasado 13 de diciembre.
Jorge Mario Bergoglio nació en Buenos Aires (Argentina). Estudió Química, Humanidades, Filosofía y Teología. Se ordenó sacerdote hace 49 años.
NUEVA YORK, 19 Dic. 14 / 07:21 am (ACI/EWTN Noticias).- Dentro de la capilla de Nuestra Señora de la Esperanza, en la Prisión de Sing Sing de Nueva York (Estados Unidos), los reos quedaron sorprendidos por lo que habían recibido del Papa Francisco.
Denis Martínez, un delincuente sirviendo una condena de 11 años en Sing Sing, envió una original pintura de tres crucifijos como un regalo al Papa Francisco.
Otros presos enviaron mensajes junto con dibujos del Papa, como un símbolo de su respeto por él.
Para su gran sorpresa, los reos recibieron un regalo en intercambio del Santo Padre, que envió a Martínez y sus compañeros un rosario, estampas bendecidas, y la promesa de tenerlos presentes en sus oraciones.
“No puedo creer que uno de mis dibujos fue entregado al Papa, mientras que yo estoy aquí, atrapado”, dijo Martínez en una entrevista con el New York Times, publicada el 15 de diciembre.
“Su mensaje es uno en el que creo, uno de justicia social. Aquellos que hemos estado sobre el piso, como yo que he estado en el fondo, sabemos de la lucha”, señaló.
A pesar de que Martínez admitió que su propia fe era a veces vacilante, él y los otros reos que se unen en oración en la capilla de la prisión, sienten un especial afecto hacia el Papa.
La idea del regalo del dibujo fue de una de las voluntarias que asiste a la prisión, Betty Woodward. En sus reuniones con los prisioneros que asisten a la Misa y a los estudios bíblicos, ella a menudo habla sobre el Papa Francisco y su mensaje de amor.
“Estaban impresionados por el hecho de que una de las primeras cosas que hizo el Papa Francisco fue ir a una prisión y lavar los pies de los prisioneros en Jueves Santo”, dijo Woodward al New York Times.
“Mi reflexión personal sobre esto es que el Papa Francisco es como una figura paterna para ellos. No es una persona distante. Él es cálido, entiende cosas y habla sobre misericordia, amor y no juzgar. Estos chicos devoran ese mensaje”.
Usando una almohadilla de tinta de huellas dactilares, Martínez dibujó los tres crucifijos sobre el Calvario, reflejándose en el ojo de Cristo crucificado.
“Es un reflejo en la pupila de Cristo crucificado en medio de dos cruces más pequeñas por el buen ladrón y el mal ladrón”, dijo Woodward.
“En la mente de Denis, tienes tu elección: Puedes ser el buen ladrón o el mal ladrón. Puedes ser malo, pero volverte bueno”.
Durante una audiencia en octubre, Woodward presentó personalmente los dibujos y mensajes de Martínez y de otros presos al Papa Francisco. Tras regresar de la audiencia, Woodward entregó a los reos los regalos que el Santo Padre les había entregado a cambio de los suyos.
Adicionalmente, el Papa Francisco le dio a Martínez un retrato suyo. Tras recibir la imagen, los ojos de Martínez se colmaron de lágrimas.
“Este es el regalo más bello que he recibido aquí”, dijo Martínez, añadiendo que “no soy el mejor católico, pero mi mamá lo intentó”.
“Incluso si dudas, puedes tomar algo del mensaje del Papa. Puedes encontrarte al fondo del foso, pero aún puedes escuchar su mensaje y decir aleluya”, aseguró.
Papa Francisco y el Cardenal Juan Luis Cipriani junto a imagen de Santa Rosa de Lima. Foto: Arzobispado de Lima
VATICANO, 05 May. 14 / 10:53 pm (ACI/EWTN Noticias).- El Papa Francisco recibió esta mañana en audiencia privada al Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne.
En la reunión, señala una nota del Arzobispado de Lima, el Cardenal le entregó un cuadro de Santa Rosa de Lima, Patrona del país, que unos sacerdotes de la capital peruana le enviaron como obsequio al Santo Padre.
El viernes pasado el Pontífice se reunió por primera vez con el Consejo de Economía del Vaticano, del cual forma parte el Cardenal Cipriani.
En dicha reunión se inició la redacción del borrador de los estatutos y se presentó el trabajo desempeñado por la Comisión de estudio y guía sobre la organización de la estructura económico-administrativa de la Santa Sede.